Un registro eterno para quienes se fueron, pero nunca se olvidan
Antonio era una persona de carácter siempre alegre, con una gran sonrisa. Su simpatía y sociabilidad iluminaban cualquier reunión. Siempre dispuesto a conversar, escuchar, compartir buenos momentos y demostrar su cercanía, fue un pilar de amistad y cercanía para familiares y amigos.